Cartagena de Indias
Muchísimo intelectuales, desde que Bartolomé de las Casas editara en Sevilla (1552), tan solo 60 años después del “Descubrimiento” de Cristóbal Colón (muy poco tiempo para hacer juicios históricos), su “Brevísima relación de la destrucción de las Indias”, vienen discutiendo sobre el origen de la “Leyenda Negra” española: son tantos siglos ocupados en este tema que nos la hemos acabando creyendo. De tal manera que es tan notable el sentimiento de inferioridad de nuestra política exterior que ni siquiera nos defendemos de los injustos improperios y faltas de respeto que desde hace ya bastante tiempo venimos sufriendo en muchos frentes.
Efectivamente durante los siglos: ...XV, XVI, XVII, XVIII… ,la humanidad era totalmente distinta y marcada por los absolutismos reinantes otorgados por aquel dios que se utilizaba para argumentar intereses y ambiciones políticas, y también estaba impulsada por fanatismos apoyados en defensa de valores religiosos sin ningún sentido actual en nuestras sociedades y que hoy tan sólo intuimos ya que la actual mentalidad occidental no comprende ni la crueldad, ni la falta de respeto por la vida. Aún así, paises como Inglaterra no ocultan estos aspectos históricos: recientemente pude comprobar como exhiben orgullosos las salas de torturas del Palacio Real Medieval dentro del complejo fortificado denominado Torre de Londres y ¡cobran por ello!. Me pregunto: ¿qué pasa en España? Donde, dada nuestra especial idiosincrasia, cada "cuatro años" los jóvenes alumnos estudian en algunos aspectos una Historia distinta.
Pero España se comportó en América, juzgándola -a mi modesto entender- con el tamiz de más de cinco siglos desde el Descubrimiento, mucho mejor que otro imperios, por ejemplo el inglés. Los españoles mestizamos nuestra sangre y nuestra cultura. Un ejemplo de esto último en la mexicana Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695), una de la más brillantes plumas de siglo de Oro de las letras Hispánicas y cuyas obras fueron editadas en Sevilla en aquellos tiempos; al margen de todos los fenomenales artistas que han existido después de ella en Hispanoamérica, incluido el reciente Premio Nobel de la Literatura, el escritor peruano, con la doble nacionalidad también española desde 1993, D. Mario Vargas Llosa, etc., etc., etc.; así hasta casi el infinito. Y esto fue de tal manera que desde 1538 en que se fundó la primera Universidad Americana en Santo Domingo, Republica Dominicana, durante el resto del siglo XVI, y los siglos XVII y XVIII España funda nada más y nada menos que la friolera de 25 Universidades repartidas por toda Hispanoamérica: Lima (Perú)-1551; México-1551; Córdoba (Argentina)-1621; etc., etc., etc. Portugal e Inglaterra no fundaron ninguna.
La actuación en América del Norte del Imperio Inglés primero y de los anglófonos en general después fue mucho más cruel. La población indígena desapareció casi por completo. Y, por supuesto, ningún tipo de mestizaje, ni de sangre, ni cultural; nada en absoluto..
La principal ventaja que han tenido siempre los ingleses sobre otros pueblos fue una gran habilidad para decantar la Historia a su favor, tanto en el interior, creando un orgullo nacional arrollador, como hacia el exterior, venciendo moralmente a sus enemigos, entre los que nos encontrábamos.
El rey ingles Jorge II prohibió bajo pena de muerte recordar, especialmente a los historiadores, la derrota de una flota inglesa, aún mayor que la Armada Invencible de Felipe II, por abnegadas y escasas tropas españolas, comandadas con astucia, inteligencia y valentía por el manera drástica la Almirante D. Blas de Lezo(1689-1741) en la bahía de Cartagena de Indias. Esta victoria permitió la existencia de Hispanoamérica, ya que frenó la intentona expansionista inglesa en el continente Americano, dada la capital importancia geopolítica por entonces de dicha ciudad. Fue una histórica victoria olvidada por la Historia de España, cosa del todo injusta cuando, entre otros aspectos, el español es hablado ahora por más 400 millones de habitantes en todo el mundo gracias a ella.
Como ejemplo de lo anterior, recordemos que la conmemoración inglesa de la batalla de Trafalgar ocupa la principal plaza de Londres; los que han estado allí habrán comprobado la categoría del pedestal que eleva al almirante inglés Nelsón. También en España se recuerda en los libros escolares la “Armada Invencible” de Felipe II de la que todos sabemos su destino y ni se menta la denominada “Invencible Inglesa”, también llamada “Contraarmada”, que era del mismo tamaño que la nuestra y que tuvo el mismo final , estando comandada por el inglés Francis Drake, quien había sido anteriormente pirata e incluso mercader de esclavos.
Quiero recordar aquí a otro glorioso e insigne olvidado de la historia popular española: D. Diego de Sarmiento y Acuña (1567-1622), Primer Conde de Gondomar (Pontevedra), quién mantuvo a raya al salteador pirata inglés Francis Drake y a la “Invencible Inglesa” en la costa gallega en 1589 durante la Guerra Anglo-Española(1585-1604), interviniendo en la defensa de la Coruña la también allí celebrada: la heroica María Pita, y también repeliendo una incursión inglesa que desembarcó en playas cercanas a Bayona, cerca de Gondomar. Felipe II a D. Diego le había nombrado Comandante Militar en la Frontera Portuguesa y Costas de Galicia en 1583, con apenas 18 años. Posteriormente fue designado embajador en Londres.
Y me detengo aquí porque se trata de hacer un post, no un tratado. Sólo decirles que los españoles en lo referente a la Hispanidad tenemos sobrados motivos para sentirnos orgullosos y que, en mi humilde opinión, la “Leyenda Negra” es obra de los que fueron nuestros enemigos pero, repito, me temo que nos la hemos acabado creyendo.
¿Qué nos pasó y qué nos pasa?
Nota: Les adjunto un vídeo Youtube ilustrativo de la categoría de la Biografía del Almirante D. Blas de Lezo, el más grande estratega de la Historia de la Armada Española, y de la gran derrota sufrida por los ingleses en la citada Cartagena de Indias.
VÍDEO: Blas de Lezo y cartagena de Indias.
NOTA: el próximo viernes en el Peñón de Gibraltar se va a celebrar un juicio injusto contra el patrón del "DIVINA PROVIDENCIA"; no sé...yo no soy diplomático pero esta ocasión podría servir para poner a cada uno en su sitio; podría ser un Juicio de la Historia.
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